El Síndrome de enterocolitis inducida por proteínas de los alimentos, es un tipo de reacción no IgE mediada cuyos síntomas más típicos son los vómitos, diarrea y la deshidratción que puede acompañarse de letargia y descenso de la presión sanguínea constituyendo una situación de gravedad.
Los síntomas no son inmediatos y las pruebas clásicas de alergia alimentaria IgE mediadas son negativas por lo que se puede retrasar el diagnóstico.
Un patrón clásico de presentación es la aparición de vómitos unas 2-3 horas después de la ingesta del alimento desencadenante, vómitos que suelen ser repetidos y puede asociar diarrea. Se puede acompañar de baja presión arterial y deshidratación con el riesgo potencial del shock. Otro patrón de presentación en la aparición progresiva de vómitos de gravedad creciente con diarreas y fallo de medro.
En los primeros meses de la vida los desencadenantes más habituales son las fórmulas de leche de vaca o soja, incluso la leche materna pueden inducir síntomas en algunos casos.
Otros alimentos implicados son el arroz, avena, cebada, leguminosas o patatas, pero cualquier proteínas es capaz de inducirlo.
El diagnóstico es fundamentalmente clínico y descartando otras enfermedades en su diagnóstico diferencial. La prueba definitiva es la provocación controlada en medio hospitalario.
El tratamiento esencial es la evitación del alimento desencadenante. La enfermedad se resuelve con el tiempo realizando una correcta dieta y seguimiento por su especialista.